I think engaging in historical dialogue anchored on a strong desire to create harmony and awareness is the most effective in long-term prevention of mass atrocities. This approach helps humanity to learn about past atrocities and design ways and methods of prevention. A historical dialogue in the Kenyan context could come in the form of having a memorial center for victims of post-election violence where experiences can be shared and lessons learnt can be well documented. Kenya has attempted to address mass atrocities prevention in a number of ways and the International Criminal Court (ICC) has intervened in the Kenyan post-election violence with limited success. Kenya also established a Truth, Justice and Reconciliation Commission to address historical injustices and promote cohesion and yet the subsequent elections proved to be very divisive. A memorial center, in my humble view, would serve to tell the story of past/historical injustices as well as provide insights on the root cause of the post-election violence in Kenya. It will also serve as a resource center for students, scholars, victims and stakeholders to learn and share ideas. In addition to this, a memorial center, by its very nature, is often difficult to ignore and would always stimulate dialogue on mass atrocity prevention. The idea of a memorial center can be achieved through collaboration and partnership of all stakeholders in the field of mass atrocity prevention.
In Kenya, atrocity crimes are largely related to the election cycles. After the post-election violence in 2007, the immediate focus was on the punishment of the perpetrators. The International Criminal Court intervened and Kenya also established the International Crimes Division (ICD) at the High Court to prosecute the lower cadre of perpetrators. Neither the ICC nor the ICD achieved much in terms of actual prosecutions. Building on the lessons learnt in 2007, many stakeholders collaborated to promote peace by having peace dialogues during subsequent elections. The expectation was that future elections would be peaceful. However, the recently concluded elections were also characterised by violence in some parts of the country, but not to the scale witnessed in 2007. Although there is relative peace and a sense of normalcy following the commitment of the opposition to work with the government, there are still underlying issues that can potentially trigger violence. During the recently concluded elections, the KNC collaborated with other stakeholders in promoting peace and engaging in high-level dialogues. However, the peace dialogues must be continuous and should not be limited to the electioneering period for meaningful results to be realised. Therefore, there is an opportunity for KNC to champion and scale up mass atrocity prevention initiatives.
Mass atrocity crimes often result from violations of international humanitarian law. Therefore, a concerted effort by various stakeholders to ensure compliance with and respect for various legal instruments of international humanitarian law represents an important tool for the prevention of mass atrocities. Importantly, this requires sound legislation on mass atrocity crimes. In this respect, Kenya National Committee, through the support of the United Nations Office on the Prevention of Genocide and the Responsibility to Protect, has engaged a consultant to draft a Bill on Prevention and Punishment of International Crimes and Atrocities.
Auschwitz-Birkenau was a humbling experience. On one hand, atrocities expose the darker side of humanity. On the other hand, the coping mechanisms of the victims and the concerted effort not to have a repeat shows the resilience of humanity. The Lemkin Seminar exceeded my expectations. It was very informative and interactive. The diversity of the instructors and participants and their grasp of the content proves that it is a melting pot when it comes to mass atrocity studies.
Mass atrocities have torn nations apart and caused untold suffering. The cost of rebuilding is too high. Some individuals have paid the ultimate price while others have lost the rhythm of life and their dignity in the face of these atrocities. My interest in the field of the prevention of mass atrocities is rooted in the impact it has on the lives of ordinary people and the country at large.
Creo que involucrarse en un diálogo histórico basado en un fuerte deseo de crear armonía y conciencia es lo más efectivo en la prevención de atrocidades en masa a largo plazo. Este enfoque ayuda a la humanidad a aprender sobre las atrocidades del pasado y diseñar formas y métodos de prevención. Un diálogo histórico en el contexto de Kenia podría tomar la forma de establecer un centro de memoria para las víctimas de violencia postelectoral donde las experiencias pueden ser compartidas y las lecciones aprendidas pueden estar bien documentadas. Kenia ha intentado abordar la prevención de atrocidades masivas de varias maneras y la Corte Penal Internacional (CPI) ha intervenido en la violencia postelectoral de Kenia con un éxito limitado.
Kenia también estableció una Comisión de Verdad, Justicia y Reconciliación para abordar injusticias históricas y promover la cohesión. Sin embargo, las elecciones posteriores resultaron ser muy divisivas. Un centro de memoria, desde mi punto de vista humilde, serviría para dar cuenta de las injusticias históricas, así como proporcionar información sobre las causas fundamentales de la violencia postelectoral en Kenia. Este lugar también servirá como un centro de recursos para estudiantes, académicos, víctimas y otras partes interesadas para aprender y compartir ideas. Además de esto, un centro de memoria, por su propia naturaleza, a menudo es difícil de ignorar y siempre estimulará el diálogo sobre la prevención de atrocidades masivas. La idea de un centro con ese enfoque y características se puede lograr a través de la colaboración y la asociación de todos los socios y partes interesadas en el campo de la prevención.
En Kenia, los crímenes atroces están relacionados en gran medida con los ciclos electorales. Después de la violencia postelectoral en 2007, el foco inmediato estuvo en el castigo de los perpetradores. La Corte Penal Internacional ha intervenido y Kenia también estableció la División de Delitos Internacionales (ICD) en el Tribunal Superior para enjuiciar a los cuadros inferiores de los perpetradores. Sin embargo, ni el ICC ni el ICD lograron mucho en términos de enjuiciamientos reales.
Sobre la base de las lecciones aprendidas en 2007, muchas partes interesadas colaboraron para promover la paz a través de diálogos de paz durante las elecciones posteriores. La expectativa era que las elecciones futuras serían pacíficas. Sin embargo, las elecciones recientemente concluidas (en agosto de 2017) también se caracterizaron por la violencia en algunas regiones del país, pero no al nivel observado en 2007. Aunque hay una paz relativa y una sensación de normalidad tras el compromiso de la oposición de trabajar con el gobierno, sigue habiendo problemas subyacentes que pueden desencadenar la violencia.
Durante las elecciones recientes, el KNC colaboró con otras partes interesadas para promover la paz y participar en diálogos de alto nivel. No obstante, los diálogos de paz deben ser continuos y no deben limitarse al período electoral para realizar resultados significativos. Por lo tanto, el KNC tiene una oportunidad de defender y ampliar las iniciativas de prevención de atrocidades masivas.
Con frecuencia, los crímenes atroces masivos son el resultado de violaciones del derecho internacional humanitario. Por lo tanto, un esfuerzo concertado de varias partes interesadas para garantizar el cumplimiento y el respeto de diversos instrumentos jurídicos del derecho internacional humanitario representa una herramienta importante para la prevención de atrocidades masivas. Es importante destacar que esto requiere legislación efectiva sobre crímenes atroces. A este respecto, el Comité Nacional de Kenia, con el apoyo de la Oficina de las Naciones Unidas para la Prevención del Genocidio y la Responsabilidad de Proteger, contrató a un consultor para elaborar un proyecto de ley sobre la prevención y castigo de estos crímenes.
Auschwitz-Birkenau fue una experiencia que me ha ayudado a tener mas consciencia. Por un lado, las atrocidades exponen el lado más oscuro de la humanidad. Por otro, los mecanismos de las víctimas para salir adelante y el esfuerzo concertado para no repetir los crímenes muestran la resistencia de la humanidad. El Seminario Lemkin superó mis expectativas. Fue muy informativo e interactivo. La diversidad de los instructores y participantes y su comprensión del contenido demuestra que hay mucha diversidad en el campo de estudios sobre atrocidades masivas.
Las atrocidades masivas han desgarrado las naciones y son la causa de un sufrimiento incalculable. El costo de la reconstrucción es demasiado alto. Algunas personas han pagado el precio máximo, mientras que otras han perdido el ritmo de la vida y su dignidad frente a estas atrocidades. Mi interés en el campo de la prevención de atrocidades en masa tiene sus raíces en el impacto que este trabajo tiene en las vidas de la gente común y del país en general.